Soy noche, que penetra en la carne
y derrama lágrimas de sangre.
Un suspiro de mentiras, el fuego que
quema el alma siniestra.
Soy la llaga con ecos de llantos desgarrados.
Soy el olor a muerte que llega en un instante
traspasando; montañas, llanos y ríos
y mares, cielo y tierra.
Soy el abismos de otros cantos.
Soy el color a niebla de la negra sombra.
Soy la estrella que se apagara en un instante.
Murmurando la lluvia del mundo basto.
Soy noche fúnebre a maullar los gatos.
Soy tiniebla y placeres de los ángeles
descalzos
Soy instante soñoliento de la vida y la
muerte...
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